Dos lados muy distintos

Hola! hago esta intro por si no me conoces.
 
Mi nombre es Flor y si bien es verdad que acompaño a mujeres a que puedan descubrir cuál es ese trabajo que las motiva, entusiasma y las llena de disfrute acá no vas encontrar ni tips ni challenges forzados. Mi foco y mi invitación es distinta. En estos mails vas a encontrar historias de mi vida mezcladas con preguntas para vos, te recomiendo que no las dejes en la mente y que arranques este domingo con mate y cuaderno a mano.
 
¿Arrancamos?

Cuando terminé de escribir este mail me di cuenta que en realidad estaba contando solo una parte de la historia, y a esta altura, esta historia merece que contemos las dos. 

El ying:
 
La selección argentina gana su tercer mundial y el primer mensaje de los jugadores fue: Los argentinos nacimos para sufrir. ¨Ay no!¨ pensé cuando lo escuché. 
 
No es algo que solo lo dijeron los jugadores, sino que también una millonada de otras personas replicaron el mismo discurso. Y no digo que este bien o este mal, solo digo que a mi me hace ruido, no me gusta y no quiero llevarlo para mi vida.
 
Yo no quiero decir que nací para sufrir.
Tampoco soy del discurso de ¨solo hay que ser feliz¨.
 
No se que tan en serio se dice la frase pero lo cierto es que se dice, y se repite, una, dos, mil veces.  Se repite a la mañana, a la tarde y a la noche. Y en algún punto de todo ese loop de escuchar y decir ¨los argentinos nacimos para sufrir¨, te la podes creer y dejas de esperar que las cosas puedan ser diferentes.
 
Ahora,
¿Sufrí viendo el partido?
Pues claro!
No lo podía creer!
Vi el alargue, parada, moviéndome de un lado a otro, nerviosa.
 
Pero de ahí a decir que nací para sufrir no, son dos cosas muy distintas amiga.
 
Quizás pensas que soy una densa y una pesada y que ¨en esta casa no se puede decir nada¨. Y esta bien, cada una piensa lo que piensa. Yo solo quiero parar un toque el carro y poner este tema sobre la mesa.
 
Mas que nada por lo que te voy a contar ahora, porque todo se une con todo.
 
….
 
Hace una semana compartí algo que sabía que iba a ser polémico. ¨Vivir de rentas¨. Grabé un podcast y todo. Si no me leíste o no me escuchaste lo podes hacer acá y acá.
 
Un poco la conclusión a la que llego es que ni se nos pasa por la cabeza que nuestro trabajo puede traernos disfrute, es como que ni lo podemos ni imaginar. Menos que menos que no solo nos da disfrute sino que encima nos puede pagar el alquiler, la tarjeta las vacaciones y el supermercado. 
 
Acá pará la lectura y pregúntate del 1 al 10 
¿Cuánto crees que esto es posible?
 
¿Cómo es que llegamos a naturalizar que el trabajo es solo sacrificio y pasarla mal?
 
Si me preguntas, sacando los privilegios de lado (porque incluso hay mujeres archi privilegiadas que hay tampoco lo pueden ver)  esto viene de un discurso que se repitió tanto pero tanto que ya lo damos por normal, lo aceptamos y no lo cuestionamos. 
 
Nos quejamos, buscamos cual es el próximo feriado y listo, a laburar.
 
Para que investigues: Busca en google la etimología de trabajo y contame que encontrás.
 
Para cerrar este capítulo: Yo no quiero decir que nací para sufrir, ¿vos?
 
Hagamos un parate para buscar el mate.
 
El yang: 
Para contrarrestar y mostrar que no todo es blanco, negro o rosa, el otro día en un post  escribí esto:
 
¨¡Elijo creer amiga!
 
Este mundial me atravesó! Me ilusionó y me llevó al sillón a ver cada partido.
Yo, cero futbolera de la vida estaba ahí: cantando, sufriéndo y bancándola.
El efecto colectivo y en mi caso individual fue locura total!
 
Y acá estoy escribiendo.
Porque estoy segura que esto vale para el mundial y para la vida:
 
Elijo creer que nos podemos ilusionar, que nos podemos emocionar.
Elijo creer que se puede, que podemos.
Elijo creer que aunque haya presión y ganas, el foco se pueda poner en disfrutar.
Elijo creer que aunque a veces te empaten 2 veces en el último minuto, se puede ganar.
Elijo creer que nos podemos juntar sin pelear para festejar.
Elijo creer que los sueños, con tiempo y laburo, se cumplen.
 
Gracias por tanto!
 
Elijo creer como nuevo mantra de vida!¨

 
Aviso para las no argentinas: Elijo creer fue parte de una especie de slogan de este mundial en donde se hablaban de las coincidencias entre el campeonato de 1986 (donde también argentina salió campeon, y el 2022). Acá podes ver la publicidad que arrancó todo. Lo que arrancó con esta publi se transformó y tomo fuerza, empezamos a ver coincidencias en todo y elegimos creer.
 
Para cerrar ¿Qué elegís creer amiga?
Sentate y escribilo.
 
Recomendación amorosa para ir cerrando este mail: Este post de luchiines.
 

Acá sigo en modo festivo mundial que decirte….
Te mando un abrazo grande grande!
Nos vemos el próximo domingo.
 
Flor
 
Como siempre si mi contenido, mis preguntas, los podcast o algún pedacito de lo que hago te gusta, podes invitarme un cafecito desde acá.
 
También y si queres, podes recomendarlo o reenviárselo a una amiga.
Yo feliz!
 
Como siempre, antes de cerrar, algunos datos randoms de mi vida 
 
1- ¿Se acuerdan del modo PAD? Bueno, para mi esta semana eso fue manejar 100 km.
2- Tenía ganas de volver a pintar, como no se me ocurría que, copié un dibujo que me gustó y lo pinté arriba.
3- Como Flor Sichel, yo también soy fundamentalista del espiral tradicional verde
4- Pasados los 30 grados medio que me pongo de mal humor jaja send ventilador y aire acondicionado. (Dami dice que soy medio oso polar).
 
 
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