La energía con la que vivimos se mueve, se acumula y cambia según lo que atravesamos.
Personas, espacios y emociones pueden saturarla sin que nos demos cuenta.
Cuando eso pasa, se siente en el cuerpo cansancio, confusión, irritación, sensación de “no estar presente”.
Esta clase está diseñada para ayudarte a reconocer esos desbalances y aprender a identificar qué energía es la que debo de cuidar.